Por Carlos Cisternas, profesor MBA USACH e International Consultant and Key Speaker.
El Business Analytics es la práctica de usar datos para gestionar la información y el rendimiento y hacer decisiones más efectivas.
El entorno que rodea a la empresa se ha vuelto cada vez más complejo y caótico. Las empresas tienen que considerar la totalidad del ecosistema en el que operan. Además, el volumen de datos comerciales de importancia producidos diariamente ha aumentado exponencialmente, incluyendo grandes cantidades de datos no estructurados provenientes de las redes sociales.
La analítica ha pasado de una posición donde predominaba una gran dependencia de datos operativos a una combinación de información interna y señales externas capaces de dar forma a la visión de futuro decisiones estratégicas, operativas y comerciales.
Si pensáramos el análisis en términos de una cadena de valor de la analítica podríamos señalar áreas estructurales como;
La Gestión de la Información, donde los problemas de gestión de datos se abordan como estrategia de información empresarial en términos de datos almacenamiento, datos maestros, calidad de datos, gestión y diseño de infraestructuras. La gestión de la información se refiere a los hechos: qué datos necesitamos aprovechar para comprender el negocio y mejorar el rendimiento.
La Optimización del rendimiento, que se refiere a soluciones de gestión del rendimiento empresarial tales como inteligencia empresarial, planificación, elaboración de presupuestos y previsiones, consolidación financiera, ejecución de la estrategia, informes de cumplimiento y riesgos en el análisis de valoración.
Los Insights analíticos, centrándose en patrones, análisis predictivo, visualización de datos, minería y optimización y algoritmos avanzados.
La analítica de insights crea conocimiento en la organización explorando lo que puede suceder en el futuro y proporcionando perspectivas de futuro a partir de datos que se pueden incorporar a los procesos de negocio existentes.
Convertirse en una organización basada en datos comienza con el desarrollo de una estrategia integral en torno al uso de datos y análisis para lograr una ventaja competitiva transformadora y sostenible.
La analítica permite un cambio de enfoque de simplemente entregar datos a establecer un enfoque de análisis empresarial para evolucionar hacia una empresa inteligente.
Las organizaciones toman decisiones basadas en el análisis de datos con objetivos precisos como:
• Crear planes, explorar alternativas y comprender ventajas y desventajas
• Supervisar el rendimiento operativo y financiero
• Dirigir y potenciar los procesos operativos diarios, asignación de capital y recursos
• Predecir resultados futuros
• Responder a los cambios en las condiciones comerciales
Entender la importancia de generar las capacidades de adquirir, consolidar y transformar datos simples en información relevante, determinará la inevitable evolución de los modelos de negocios de las compañías.
Sin embargo, extraer información procesable de los datos se vuelve más difícil a medida que los volúmenes de datos continúan aumentando. Años de innovación tecnológica se han centrado en llevar a las empresas más allá de la dependencia del amado excel, sin embargo, las herramientas manuales y fuera de línea continúan respaldando la toma de decisiones y los informes de gestión críticos sobre todo a niveles de alta dirección como directorios y boards.
Lo que no resiste duda es que la optimización del rendimiento mejora nuestra comprensión de lo que está sucediendo actualmente.